Circunstancias
que no es necesario reseñar aquí me llevaron a disfrutar del concierto que
Amancio Prada dio ayer en Granada en compañía del amigo Demetrio, tras el cual
y volviendo ya a casa, nos dio pié para un buen rato de charla.
A ratos
divertida, nos llevó por diferentes momentos de nuestras vidas y vivencias y en
referencia a la época de juventud soltó una frase que me gustó mucho y me hizo
mucha gracia.
Dijo: “Los
dieciocho los tengo con un filtro Orton”
Los
aficionados a la fotografía saben del fotógrafo Michael Orton que fue quien diseño
la técnica en tiempos de la fotografía analógica y que aportan al resultado
final una mezcla de bucolismo y misterio según el tipo de fotografía que
resulta muy visual y agradable.
Muy
utilizado sobre todo en paisaje.
Tiene la ocurrente frase del amigo Deme mucha miga y daría para buenas disquisiciones sobre las actitudes, vivencias y recuerdos de quienes hemos vivido una época con objetivos por los que luchar, con muros que derribar.
Muros que hoy, vuelven a levantarse para nuestra desgracia y con el pasivo consentimiento de una sociedad que parece limitarse a lloriquear mientras le roban la cartera con la mente abotargada con el moderno pan y circo que la clase política consiente y aún propicia en aras de una supuesta paz social que no es otra cosa que derrotismo por parte de unos y especulación y latrocinio por parte de los otros.
Hola Txema, soy Isabel Gutiérrez, me recordarás porque te pedí que me hicieses una foto cuando Amancio Prada me firmase el libro en el concierto de Granada. Muchísimas gracias. Como ves, sin conocerte, mi ojo clínico me llevó, en un barrido visual, a elegirte a tí entre las personas que estaban allí. Al decirme tú que las fotos tardaban mucho, luego ví que, sin querer había dejado la velocidad lenta y las fotos no han salido perfectas. Bueno, no importa, tengo un buen recuerdo de ese momento. Te lo agradeceré siempre, cuánto más porque tú también estabas con tu propio trabajo con tu amigo. Ahora ya me doy cuenta. Bueno, nada más, ya estoy de nuevo en Madrid con mi pintura, despues de unos días muy bonitos en Sevilla y ese salto a Granada para oír a mi admirado Amancio Prada.
ResponderEliminarTodos podemos tener dieciocho años con filtros mágicos, pero mejor tener nuestra propia edad y volver a luchar con fuerza contra la ignominia que nombras en tu comentario.
Gracias de nuevo Txema.