sábado, 3 de diciembre de 2011

Territorio Basajaun II

En el bosque




Llevo un buen rato internándome en este mundo de color,  no hay caminos, no hay referencias, un árbol es igual a otro.
Noto una presencia invisible,  un sonido que me llega desde un lado y voy hacia allí, pero nada cambia, la luz sigue llegando tamizada, teñida del multicolor de las hojas del hayedo en otoño, denso y misterioso, pero va decayendo y cuesta ver con claridad.
Vuelve la sensación en la nuca y me giro…pero nada. Nada cambia y nuevamente otro sonido como de pasos entre la hojarasca dirige los míos. Si no encuentro pronto una senda, un camino, alguien se preocupará y no quiero que así sea.
Todo parecía muy sencillo al comenzar la andadura. Total, estamos en el mundo civilizado y esto no será tan grande, pero son ya muchas horas de marcha en soledad y una cierta angustia se alía con el cansancio.
¡Otra vez! y muy claramente además, algo o alguien se ha movido por delante de mí, incluso he visto ramas moverse y dudo si no será mi imaginación y el deseo, pero juraría que también he visto una desdibujada figura que se perdía entre los árboles. Con ciertas dudas alzo la voz en una llamada que pretende ser casual, como de “mira qué casualidad oye”, pero nadie contesta, todo ha vuelto a quedar en silencio.
Con una cierta urgencia dirijo mis pasos hacia allí y poco después encuentro el camino.
 ¡ POR FIN!
Dedicado a la amiga Alicia Pop

2 comentarios:

  1. Mil gracias Txema!!!!
    Tus imágenes y tus palabras impactan!
    Logras atrapar la atención en ambas, tienes talento!!!

    Muchas gracias y saludos mendocinos!!!

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  2. La historia engancha, me gusta. Y la foto le va al pelo.

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